FORMA

Dentro del marco de la materia nos limitaremos a emplear el término forma para referiros a un determinado aspecto exterior, configuración o estructura que es percibida a través de nuestros sentidos, pudiendo referirse a su contorno o silueta. 

FORMAS ABIERTAS Y CERRADAS

Estas caracterizaciones se refieren a la relación de la forma con el medio. Una forma abierta es aquella que debido a la relación de luces y sombras, al color o la textura, se encuentra fundida en parte con el fondo; si hablamos de escultura o, en general, de formas tridimensionales, estas tienen numerosas "entradas y salientes" o confunden sus partes interiores con el exterior.

Ejemplos:

Francis Bacon, Crucifixión 

Óleo sobre tela, 1933

 Louise Bourgeois, Mamá

Bronce, 1999

Las formas cerradas serán aquellas que mantienen contornos continuos que limitan la interacción con el fondo haciendo que la forma sea fácilmente diferenciable del fondo.

Ejemplos:

Constantin Brancusi, Pájaro en el espacio

Mármol, 1923

Tarsila do Amaral, Abaporú

Óleo sobre tela, 1928

FORMAS GEOMÉTRICAS Y ORGÁNICAS

Podemos describir estas formas como aquellas que se originan a partir de una fórmula o construcción matemática, si bien primeramente pensamos en líneas rectas y ángulos, también se incluyen los círculos, sus fragmentos y elipses. 

Ejemplos:

Roberto Aizenberg, Torre

Óleo, 1990 - 1995

Cristina Tomsig, Juego Verde II 

Aluminio y P.V.C., 2007

Las formas orgánicas son aquellas que encontramos en la naturaleza, son un poco más irregulares y difíciles de explicar a través de la geometría.

Ejemplos:

Pablo Dompé, Toqui

Talla directa en mármol de Carrara, 2008

 Max Ernst, El ojo del Silencio

Óleo sobre tela, 1943

Lo que debemos rescatar de esta clasificación es la impronta que le dan a la imagen, la geometría hará que se vea más "perfecta", ordenada y fría; en tanto que las referencias orgánicas otorgan suavidad, libertad y fluidez.